Este fin de semana 360RunningBarcelona hemos estado en la Maratón de Collserola, un evento imprescindible en vuestro calendario si sois de los que os gusta la montaña. Cualquiera pensaria que estamos en medio del Pirineo y no al lado de Barcelona, en la vecina sierra de Collserola.

A las 8 de la mañana, y después de un emotivo minuto de silencio en memoria de la corredora Teresa Farriol (que murió durante la Cavalls de Vent de este año), arranca el maratón. La primera rampa, muy exigente, es sólo un preámbulo de lo que vendrá! La subimos andando, una serpiente de corredores remonta esta primera cuesta para plantarnos en medio de la Serra de Collserola a las primeras de cambio!

Tramo llano, que podemos hacer ligeros; el primer avituallamiento con ensaimadas de chocolate que invitaba a tomarse un café con leche y sentarse a leer el periódico! Hasta el kilómetro 18 hemos hecho una carrera bastante rápida, pero aquí nos espera la subida a las colinas de Can Balasc, la mayor parte de la cual hacemos andando a un ritmo alegre. Una vez en el avituallamiento de arriba, nos juntamos un pequeño grupo de corredores que rodaremos juntos todo lo que queda de carrera. La bajada es emocionante, un descenso técnico pero que hacemos con ganas y bastante rápido.

La subida al puerto de la Vinaxa, al pie del Tibidabo, se hace muy dura, pero menos de lo que esperaba. La primera mitad y pico la hacemos caminando, pero cuando el desnivel es más suave, decido empezar a trotar y avanzar un poco más rápido, a pesar de ser consciente de que aún quedan unos 15 kilómetros para la meta. Pero la cosa va bien, y las fuerzas todavía nos acompañan.

La bajada hasta Sant Medir es larga, y aunque las piernas ya están muy cargadas, la podemos hacer bastante rápido, aunque conservando un poco, por si acaso … La última subida la hacemos con ganas, pero al ritmo que las piernas nos dejan, no muy rápido a estas alturas de la carrera. El tramo de la Carretera de les Aigües se me hace especialmente duro, el compañero de corredors.cat, Diego, me deja atrás unos metros, no puedo seguir. Menos mal que por fin llegamos al sendero de bajada,el último, y que nos lleva directos al Velódromo de Horta, punto de inicio y final de esta emocionante carrera. Vamos para abajo, no puedo, las piernas están muy cargadas, voy muy justo de fuerzas, pero me gustan las bajadas, veo que recorto distancias, y en menos de un kilómetro he vuelto a atrapar a Diego y al resto de corredores. Adelanto a un par de ellos y llego solo a meta, triunfante y muy feliz de terminar mi primera maratón de montaña!

AH!! Y la sorpresa de última hora: Clara estaba allí, esperando y animando como la primera fan incondicional de los 360ºRunningBarcelona!